UNA DE GATO

AUMENTA LAS DEFENSAS Y COMBATE LA ARTRITRIS

DESCRIPCION DEL PRODUCTO

COMPOSICIÓN: Uña de gato (Uncaria tomentosa).
CONTENIDO: 250 cápsulas / 300 mg. cada una.
DOSIS : Tomar 1 cápsula tres veces al día.
ADVERTENCIAS: No administrar a mujeres en estado de gestación o lactancia.

UÑA DE GATO es un poderoso antiinflamatorio de gran ayuda en el tratamiento de ciertos tipos de cáncer debido a La pteropodina que es un alcaloide que pareciera que es mutagénico ya que por un íado produce apoptosis (acelera a muerte de ía célula) y por otro es citostática (frena el crecimiento de la célula), es decir tiene una doble función atacando a la célula cancerígena, acelerando su muerte y no permitiendo que se reproduzca.
La Uncaria Tomentosa se diferencia de la Uncaria Guianensis por poseer alcaloides como la isomitrafilina y la pteropodina, los cuales inhiben la multiplicación de los virus, convirtiéndose así en un poderoso estimulante al mejorar las estructuras de defensas del organismo.
Como potente antiviral, esta totalmente probado que cura herpes, resfríos, sinusitis, otitis, el virus de la estomatitis vesicular y la conjuntivitis. Al actuar también como un inmunoregulador colabora en combinación con los tratamientos antirretrovirales en el caso de las personas con HIV, al hacer que las drogas sean mas efectivas y menos violentos sus efectos nocivos por actuar también como un inmunoregulador.
Las sustancias activas con que cuenta la Una de Gato son: La Isopteropodina (ayuda al sistema inmunológico por el poder que tiene de aumentar la fagocitosis y de inhibir la reproducción de virus y células malignas conjuntamente con la pteropodina, mitrafilina, isomitrafilina), Rincofihina (previene la formación de coágulos o trombos en el cerebro, en el corazón, en los pulmones), Carragenina y otros glucosidos (son componentes antiinflamatorios que funcionan con efectividad en la artritis, la prostatitis y en inflamaciones que acompañan a estados infecciosos), Betasitosterol (Antiinflamatorio al igual que el stigmasterol y el campesterol, todos son progesténicos es decir, regularizan los ciclos menstruales, tienen efectos anticonceptivos e inhiben los cánceres femeninos), la Epicatecina y la Procianidina (son antioxidantes es decir antivejez y antitumores) y los Taninos ingrediente activo fue identificado.
La actividad antimicrobiana de Sangre de grado fue también comprobada por
Zapata (1987) contra microoganismos grampositivos, entre los cuales
encontramos Staphylococcus aureus 6538 ATCC, S. epidermidis 12228 ATCC y
Sarcina lutea 9341 ATCC y gramnegativos como Klebsiella 602 FDA,
Enterobacter, Citrobacter, Serratia, Proteus, Salmonella y Pseudomonas.
Posteriormente un grupo de farmacólogos norteamericanos (Persinos et al., 1974) logró aislar la taspina, en el que se comprobaron propiedades antiinflamatorias en pruebas experimentales. El hidroclorido de taspina en dosis de 20 mg/kg fue efectivo en reducir inflamaciones inducidas en ratas de laboratorio; además, no fue tóxico en dosis de hasta 200 mg/kg. Los investigadores esbmaron que la taspina obtenida de C. lechleri podría ser una droga útil para las enfermedades inflamatorias, como el reumatismo (NeilI, 1988). De hecho en la medicina popular ya tenía ese uso.
Vaisberg (1989) y sus colaboradores de la Universidad Peruana Cayetano Heredia presentaron en 1987 un estudio, en el que después de aislar la taspina de C. lechleri comprobaron sus efectos cicatrizantes en un test in vivo en ratas. Los experimentos realizados con hidroclorido de taspina para estudiar sus mecanismos de acción en cultivos celulares, demostraron que el alcaloide no era tóxico para los fibroblastos epidérmicos humanos y que carecía de efectos sobre la proliferación celular. Por otra parte se encontró que se incrementaba la migración de los fibroblastos, acción que probablemente explique el mecanismo por el cual la sangre de drago y el hidroclorido de taspina aceleran el proceso de cicatrización de las heridas. En las ratas se pudo demostrar finalmente, que ni la sangre de drago ni el hidroclorido de taspina tenían efectos carcinogénicos o estimuladores de la actividad tumoral. Estos notables resultados obtenidos por los investigadores peruanos confieren a C. lechleri el carácter de una planta medicinal promisoria.